Se acabaron las vacaciones de nuestros aizkolaris mancos, Gorka debe andar entre depósitos de vino azufrándose el paquete y Miguel, que empieza hoy a grabar sus guitarras, marca el horario como el péndulo de Poe. Llego al estudio a eso de las diez y cuarto, Carmencita me da un beso y me deja en la puerta, saludo al Vitro y a la Helen de Moondomain (que se pasa extraños mensajes con Miguel enBlanco?), y a Eduardo y algunos de sus compas de Mulata Groove, cuando subo a Track 666, Drunken Dan me busca con los ojos inyectados en sangre? “¿Me has traído tabaco?”, ruge con una voz que parece que estés arrastrando el tresillo de tu abuela, asustado respondo: “Sí, yonquipur, aquí lo tienes”, con eso se relaja y sigue chateando (ir con chatas) con una amiguita que se ha echado de aquí al lado (Nebraska). Fumado el primer cigarrillo el Dan recupera la compostura y ya no temo que me fume el cinganillo ni el dedo corazón ?que majo y tranquilo se queda, Dan perdóname, que me dejo llevar por la ficción??, es en ese momento cuando Miguel entra en escena y se pone a limpiar su guitarra (todo el puto día limpiándosela, un consejo chicos, aparte de meteros el dedo en el culo unos siete centímetros hasta alcanzar el punto “P”, podéis practicar sexo con Miguel porque no os va a pegar ninguna enfermedad, na de ná, a lo sumo un rabazo, y además os hablará de amplis de marcas abstractas). Se pone a buscar un sonido guay para su guitarrilla que parece y suena, al principio, como una de esas de plástico que venden los badulaques chinos? Afortunadamente todo tiene solución menos la muerte, mientras llegan Héctor y Diego (unidos por la violencia entre ellos mismos, y comos e puede ver en una foto anterior a punto de hacer el amor en un contenedor) el Miguel empieza a quitarse canciones? Una a una, con el Dan nervioso, aún le faltaba su droga favorita (pastelillos Martínez) pero hoy no iba a gozar de ellos, no señor. A las dos y media el puto Miguel se ha grabado medio disco, le ha ofrecido al Dan Defensor que grabe un solito en “En un dos” para colaborar (en medio de su mono de azúcar no supo decir que no) y le ha hecho gestos obscenos a la espalda? Estamos machacados, con la risa floja de cansancio, pero satisfechos, la verdad es que suena como un cañón, muy heavy (y no es culpa del Dan)? Nos pesan los huevos como canicones de plomo y decidimos dejarlo, mañana por la mañana será otro día (y además es probable que sea por la mañana). Hacemos un rito a Satán hablando de mujeres, relaciones raras y mariconadas, todo muy masculino. Llego a casa y me cago en el puto café del Rent &Music, me voy a leer algo, qué remedio? Por cierto, no nos visita ni Perri, a esas horas?
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